Mi película favorita, mi escena preferida:
- Charlie: Yo te admiro, Donald. He pasado toda mi vida paralizado... preocupado por lo que la gente piensa de mí... y a ti te importa poco.
- Donald: A mí no me importa poco.
- C: Es que no entiendes. Te lo dije como un cumplido. Una vez, en el bachillerato, te estaba observando en la biblioteca. Estabas hablando con Sarah Marsh.
- D: Estaba muy enamorado de ella.
- C: Ya lo sé. Estabas coqueteando con ella y se estaba portando muy linda.
- D: Me acuerdo.
- C: Luego, cuando te fuiste, ella se burló de ti con Kim Canetti. Y yo sentí como que se estaban riendo de mí. Tú ni te enteraste. Te veías feliz.
- D: Sí me enteré. Las oí.
- C: ¿Y por qué estabas tan contento?
- D: Yo amaba a Sarah, Charles. Era mío, ese amor. Yo era dueño de él. Ni siquiera Sarah tenía el derecho de quitármelo. Yo puedo amar a quien yo quiera.
- C: Pero tú le pareciste patético.
- D: Ése era asunto de ella, no mío. Tú eres lo que amas, no lo que te ama a ti. Yo decidí eso hace mucho tiempo. ¿Qué te pasa?
- C: Gracias.
- D: ¿Por qué?
3 comentarios:
Charlie Kaufman, el mejor guionista hoy, probablemente. Si no es mi película favorita, es mi segunda o tercera... ¡pero hay que competir con Woody Allen!
Me cambió la vida. Y ciertamente me cambio el modo de ver el cine, de entender el cine, de exigirle al cine. Tan bueno, tan bueno...
no es mi película favorita, pero si es mi escena de película favorita, por amplio margen. Hace poco, vi varias películas de las que me regalaron varias excelentes escenas, pero esta escena me hizo temblar, no solo es el dialogo lo que ocurre, también es la historia, el momento en que ocurre, nada la supera, nada...
Si... es un todo... increíble por donde lo mires, las simples líneas de texto no le llegan ni a los talones a la escena... y mucho menos, a la escena acompañada de la película... amazing grace!
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